Hoy la Comisión Europea ha revelado nuevos y ambiciosos planes para reforzar la capacidad de Europa para responder a las catástrofes naturales.
La propuesta es un elemento central de la agenda del presidente Juncker de una Europa que protege a sus ciudadanos. La iniciativa llega a la luz de las catástrofes naturales más complejas y frecuentes que han afectado gravemente a muchos países europeos en los últimos años. Un elemento clave de la propuesta es la creación de rescEU, una reserva a nivel europeo de capacidades de protección civil tales como aviones de extinción de incendios forestales, bombas de agua especiales, equipos de búsqueda y rescate urbano y hospitales de campaña y equipos médicos de emergencia. Todo ello completará los activos nacionales y será gestionado por la Comisión Europea, con objeto de apoyar a los países afectados por catástrofes tales como inundaciones, incendios forestales, terremotos y epidemias. Solo en 2017, más de 200 personas murieron como consecuencia de catástrofes naturales en Europa y más de un millón de hectáreas de bosque quedaron destruidas.
El presidente Jean-Claude Juncker ha afirmado: «Europa no puede mantenerse al margen cuando nuestros Estados miembros sufran catástrofes naturales y necesiten ayuda. Ningún país europeo es inmune a las catástrofes naturales, que se han convertido en la "nueva normalidad". Cuando se produzca una catástrofe, quiero que la Unión Europea ofrezca algo más que sus condolencias. Europa es un continente de solidaridad y tenemos que estar mejor preparados que antes y ser más rápidos a la hora de ayudar a los Estados miembros situados en primera línea».
«Las tragedias del pasado verano y de los últimos años han puesto de manifiesto que nuestro sistema de respuesta en caso de catástrofe ha alcanzado sus límites en su formato actual, de carácter voluntario. Los retos a que nos enfrentamos han evolucionado, así que nosotros debemos evolucionar también. Se trata de una cuestión de solidaridad y de responsabilidad compartida a todos los niveles. Esto es lo que los ciudadanos europeos esperan de nosotros, e insto a los Gobiernos europeos y al Parlamento Europeo a adoptar esta propuesta» declaró Christos Stylianides, comisario de Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis.
La propuesta de la Comisión se centra en dos líneas de intervención complementarias, destinadas a i) reforzar la respuesta colectiva a nivel europeo; y ii) mejorar las capacidades de prevención y preparación.
1. Refuerzo de las capacidades de respuesta europeas: rescEU
– Se establecerá una reserva de equipos de respuesta de protección civil cuya misión será ayudar a los Estados miembros a hacer frente a las catástrofes cuando las capacidades nacionales se vean desbordadas. rescEU incluirá activos, como aeronaves de lucha contra incendios y bombas de agua, que complementarán a las capacidades nacionales. Todos los costes y capacidades de rescEU estarán cubiertos en su totalidad por la financiación de la UE, y la Comisión tendrá el control operativo de estos activos y decidirá sobre su despliegue.
– En paralelo, la Comisión ayudará a los Estados miembros a impulsar sus capacidades nacionales mediante la financiación de los costes de adaptación, reparación, transporte y funcionamiento de los recursos de que disponen. Estos activos pasarían a formar parte de un conjunto compartido de recursos de emergencia en el marco del Grupo Europeo de Protección Civil, que podrá ser desplegado cuando se produzca una catástrofe.
2. Refuerzo de la prevención de catástrofes y la preparación para afrontarlas
– Con la propuesta de hoy, se pedirá a los Estados miembros que compartan sus estrategias nacionales de prevención y preparación, a fin de identificar y abordar de forma colectiva las posibles carencias.
– La propuesta refuerza la cooperación y la coherencia con las políticas existentes de la UE en materia de prevención y preparación. Esto incluye, por ejemplo, la Estrategia de la UE sobre Adaptación al Cambio Climático, los Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, el Fondo de Solidaridad, la legislación medioambiental (por ejemplo, planes de gestión de las inundaciones y soluciones basadas en el ecosistema), la investigación e innovación, políticas destinadas a abordar las amenazas transfronterizas graves para la salud, y muchas otras.
Por último, la propuesta racionalizará y simplificará los procedimientos administrativos a fin de reducir el tiempo necesario para movilizar la ayuda de salvamento y rescate.
Antecedentes
El Mecanismo de Protección Civil de la UE se basa actualmente en un sistema voluntario a través del cual la UE coordina las contribuciones voluntarias de los Estados participantes a un país que haya solicitado ayuda. Las ofertas de asistencia son coordinadas por el Centro Europeo de Coordinación de la Respuesta a Emergencias, con sede en Bruselas. En los últimos años, las condiciones climáticas extremas y otros fenómenos han puesto al límite la capacidad de los Estados miembros para ayudarse mutuamente, especialmente cuando varios de ellos se enfrentan al mismo tipo de catástrofe simultáneamente. En los casos en que existe poca o ninguna disponibilidad de activos, la UE no dispone de capacidad de reserva para ayudar a los Estados miembros desbordados.
En 2017 se han producido numerosas catástrofes. En total, más de 200 personas murieron a consecuencia de catástrofes naturales en Europa en 2017. Pero las catástrofes naturales también tienen graves consecuencias económicas. Desde 1980, además del coste humano, los Estados miembros de la UE han perdido más de 360 000 millones EUR por razón del clima y fenómenos extremos. Solo en Portugal, los daños económicos directos de los incendios forestales que se produjeron entre junio y septiembre se estiman en cerca de 600 millones EUR, lo que representa el 0,34 % de la renta nacional bruta de Portugal.
Desde su puesta en marcha en 2001, el Mecanismo de Protección Civil de la UE ha realizado un seguimiento de más de 400 catástrofes y ha recibido más de 250 peticiones de ayuda. El Mecanismo puede ser activado en respuesta a catástrofes de origen humano y natural, pero también apoya la preparación y la prevención.
En el Mecanismo participan todos los Estados miembros de la UE así como otros países terceros: Islandia, Noruega, Serbia, la Antigua República Yugoslava de Macedonia, Montenegro y Turquía. RescEU se ampliaría a estos Estados participantes como signo de solidaridad europea.
Para más información
Nota de preguntas y respuestas: El refuerzo de la gestión de catástrofes de la UE
Ficha informativa: El refuerzo de la respuesta de protección civil de la UE
Ficha informativa: Centro de Coordinación de la Repuesta a Emergencias de la UE