En el 30% de las operaciones de cáncer de mama se observan evidencias de que el resultado es estéticamente pobre. El proyecto PICTURE, financiado por la Unión Europea, ha abordado este asunto mediante el desarrollo de herramientas objetivas, hechas a la medida de cada paciente, con el fin de predecir y evaluar el resultado estético de la operación.
Los expertos del Proyecto PICTURE, originarios de Portugal, Reino Unido, Países Bajos y Alemania, han combinado fotografías en 3D e imágenes radiológicas (mamografías o ultrasonidos) con informaciones sobre el tumor concreto (tamaño, localización, forma) para desarrollar técnicas para modelar biométricamente la anatomía del pecho y el efecto de cualquier modificación quirúrgica en el tejido canceroso.
Según el científico coordinador del proyecto, “mediante el uso de una representación digital de la paciente y las herramientas de predicción necesarias, podemos explorar estrategias quirúrgicas alternativas. Podemos visualizar las consecuencias de las opciones disponibles, esto ayuda a la comunicación con la paciente sobre el tipo de operación de mama recomendado por el cirujano y las empodera para tener un rol activo en un proceso de decisión compartido”.
La mejora de los resultados estéticos de las intervenciones de cáncer de mama es importante. “Dado el alto porcentaje de supervivencia al cáncer de mama, muchas mujeres vivirán durante muchos años con las potenciales consecuencias estéticas de la operación y tratamientos terapéuticos. Un buen resultado estético es un elemento muy importante para el tratamiento de este tipo de cáncer, así como para la recuperación psicosocial y la calidad de vida de las afectadas”, concluye Jorg Sabczynski, otro de los investigadores.
