El 91% de las empresas españolas que exportan a Canadá son pymes.
· Marisa Poncela, Secretaria de Estado de Comercio: “es el acuerdo más ambicioso firmado nunca por la UE”.
· Christian Burgsmüller, miembro del Gabinete de Cecilia Malmström: “las pequeñas empresas ahorrarán también al evitar requisitos que duplican los ensayos, procedimientos aduaneros y gastos jurídicos”.
· Matthew Levin, Embajador de Canadá en España: “abrir nuestras sociedades y nuestras economías nos hace más prósperos, más igualitarios y más democráticos”
Madrid, 17 de noviembre de 2017
El Acuerdo Económico y Comercial Global con Canadá, CETA por sus siglas en inglés (Comprehensive Economic and Trade Agreement), beneficiará a las compañías europeas con una media de ahorro anual de 590 millones de euros. Se verán especialmente beneficiadas las pequeñas y medianas empresas, que tenían más dificultades para asumir los costes y que suponen el 91% de las exportadoras a Canadá.
Durante un acto organizado por la Comisión Europea, la secretaría de Estado de Comercio y la Embajada de Canadá en España, celebrado en Casa de América, se daba inicio a una campaña de difusión sobre las ventajas del Acuerdo. Se pretende que las empresas conozcan las oportunidades que se abren en el mercado canadiense. El acto de hoy fue el primero de este tipo, desde que el CETA fuera ratificado el pasado 27 de octubre en el Senado, convirtiendo a España en la primera de las grandes economías de la UE en finalizar el proceso de ratificación.
Los últimos datos indican que durante los ocho primeros meses de 2017, las exportaciones españolas a Canadá alcanzaron los 1.139 millones de euros y las importaciones se situaron en 1.055 millones de euros. Por tanto, el saldo comercial fue positivo para España en 84 millones.
Las exportaciones también crecieron en 2016, en concreto un 8,5% más interanual alcanzando los 1.488 millones de euros. Las importaciones fueron de 1.302 millones de euros. Lo que otorgó a España un saldo comercial positivo de 186 millones de euros.
En opinión de Marisa Poncela, Secretaria de Estado de Comercio del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, CETA es el acuerdo más ambicioso firmado hasta ahora, puesto que no se limita al intercambio de bienes, sino que abarca también servicios y contratación pública e incorpora cuestiones como la protección medioambiental, social y laboral.
La secretaria de Estado añadió, también sobre el tratado, que se trata de un acuerdo de última generación, que debe servir de guía para acuerdos comerciales posteriores. Además, Poncela recordó que la entrada en vigor del Acuerdo CETA impulsará de manera sustancial las relaciones bilaterales.
Por su parte, Christian Burgsmüller, miembro del Gabinete de la Comisaria de Comercio Cecilia Malmström, ha destacado que el acuerdo “ahorrará a las empresas de la Unión Europea 590 millones de euros al año, el importe que pagan en aranceles sobre las mercancías exportadas a Canadá”.
Burgsmüller ha insistido también en que las mayores beneficiadas son las pequeñas empresas que “ahorrarán tiempo y dinero, por ejemplo al evitar requisitos que duplican los ensayos, largos procedimientos aduaneros y elevados gastos jurídicos”. El representante de la Comisaria Malmström también resaltó que el acuerdo con Canadá facilitará la movilidad laboral, otro avance fundamental que fomentará la entrada de las pequeñas y medianas empresas, europeas y españolas, en el mercado canadiense.
Precisamente estos son algunos de los aspectos en los que se centra la nueva campaña de la Comisión Europea "Hablemos de Comercio" (#hablemosdecomercio) que quiere fomentar un debate informado sobre el comercio internacional.
Matthew Levin, Embajador de Canadá en España, ha recordado que “nunca antes habíamos incluido capítulos para garantizar el respeto al medioambiente, el desarrollo sostenible, la protección de derechos laborales y el derecho legítimo de los estados a reglamentar en el interés público”. Además ha insistido en que “abrir nuestras sociedades y nuestras economías nos hace más prósperos, más innovadores, más igualitarios y más democráticos”.
El encuentro también contaba con la presencia de José Luis Káiser, Director General de Comercio Internacional e Inversiones de la Secretaría de Estado de Comercio y Karen Kennedy, Consejera Comercial de la Embajada de Canadá en España.
La jornada tenía como objetivo representar la visión de todos los implicados en el tratado, por ello, tras la visión institucional, también se ha celebrado una mesa redonda para reflejar la visión empresarial con representantes de compañías, tanto del Ibex35 como de pymes. Se recalcaban aspectos como el comercio de bienes y servicios, inversiones y compras públicas, así como la financiación e inversiones de forma bilateral.