La Comisión Europea ha puesto en marcha tres investigaciones para determinar si ciertas prácticas de venta on-line evitan que los consumidores se beneficien de ofertas transfronterizas y no tengan la posibilidad de comprar determinados productos electrónicos a precios competitivos.
La investigación iniciada sobre la competencia en el sector, permitirá recopilar información de mercado para entender mejor la naturaleza, la prevalencia y el impacto de estos obstáculos y evaluarlos a la luz de las normas de competencia de la UE.
Las tres investigaciones de la Comisión han sido diseñadas específicamente para hacer frente a las restricciones a la libertad de fijar los precios al por menor, a la discriminación sobre la base de la ubicación geográfica y al bloqueo. Los resultados preliminares de la investigación sobre la competencia en el sector del comercio electrónico muestran que el uso de tales restricciones está muy extendido en toda la UE.
En ciertas circunstancias, estas prácticas pueden complicar las compras transfronterizas en general y, en última instancia, perjudicar a los consumidores, al impedirles beneficiarse de una mayor elección y precios más bajos en el sector del comercio electrónico. Tales prácticas pueden ser contrarias a las normas de la UE en materia de competencia tal y como se establece en el artículo 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE), el cual prohíbe los acuerdos entre empresas y las decisiones de asociaciones de empresas que impiden, restringen o falsean la competencia en el mercado único de la UE.