En el día de hoy la comisión de Medio Ambiente y Salud Pública del Parlamento Europeo votará sus enmiendas al llamado “paquete de residuos”. En resoluciones previas, el Parlamento ha manifestado su interés en fijar objetivos más ambiciosos para la gestión de residuos.
Pasar de una economía lineal a una circular es el gran reto de las sociedades actuales. Sin embargo, una mejor gestión de nuestros residuos sería beneficiosa para el medio ambiente, nuestra salud e incluso podría aportar beneficios económicos, ya que algunos estudios apuntan a que los residuos podrían ser una importante fuente de ingresos. Por ejemplo, si se consiguiera recuperar el 95% de los teléfonos móviles, se generaría un ahorro en los costes de material superior a un billón de euros al año.
Entre 2004 y 2014, el total de residuos generado en la UE se redujo en un 3% en términos absolutos. Sin embargo, no hay una tendencia uniforme entre los países: mientras países como Dinamarca aumentaron substancialmente la cantidad de residuos municipales per cápita (medido en kilos), otros como España la redujeron considerablemente (probablemente debido a la crisis económica que el país ha sufrido durante dicho periodo y al subsecuente cambio en los hábitos de consumo).
En 2014, el 44% de los residuos municipales en la UE se reciclaban o se utilizaban para obtener compost. Esto supone un incremento respecto a 2004 -cuando sólo el 31% se recuperaba-, pero no está claro que sea suficiente para alcanzar el 50% que es el objetivo mínimo fijado por la normativa actual para 2020.
En cualquier caso, todo lo que no se recicla o recupera de algún modo pasa a formar parte de vertederos o se incinera. La comisión de Medio Ambiente y Salud Pública del Parlamento vota hoy sobre el paquete de gestión de residuos, para fijar objetivos más ambiciosos en el tratamiento y recuperación de los mismos para 2030.
Este paquete se compone de cuatro Directivas que buscan gestionar los residuos de forma más eficiente y eficaz: (1) una directiva marco que incluye la gestión de residuos municipales, (2) vertederos, (3) empaquetado y (4) vehículos, baterías y acumuladores, y residuos de equipamiento electrónico. El paquete es el primer paso hacia una economía circular, donde los productos y materiales son reciclados y re-utilizados una y otra vez, de manera que continúan generando valor.