El Parlamento Europeo aprobó la directiva sobre derechos de autor con 348 votos a favor, 274 en contra y 36 abstenciones. Esta norma es un paso importante para corregir una situación que ha permitido unas pocas compañías ganar enormes sumas de dinero sin compensar adecuadamente a los miles de creativos y periodistas de cuyo trabajo dependen. Además, garantiza que internet siga siendo un espacio en el que reine la libertad de expresión. La directiva extiende la protección de los derechos de autor al entorno virtual. YouTube, Facebook y Google News son algunas de los operadores que se verán directamente afectados por esta legislación. Responsabilizar a las empresas sobre el contenido aumentará las posibilidades de los titulares de derechos (en particular, músicos, intérpretes y guionistas, así como editores de noticias y periodistas) de asegurar acuerdos de licencia justos, obteniendo así una remuneración más justa por la explotación de sus obras en el entorno digital. Las obras con objeto de citar, criticar, reseñar, caricaturizar, parodiar o imitar queda protegida, lo que garantiza que los memes y GIF seguirán disponibles y se podrán compartir en línea.