El dictamen exploratorio sobre "Sistemas de alimentos más sostenibles" solicitado por la Presidencia neerlandesa de la UE, fue aprobado por el Comité Económico y Social Europeo en su sesión plenaria el 26 de mayo de 2016.
El dictamen pide el desarrollo de una política alimentaria integral en la UE y un plan de ejecución para promover sistemas alimentarios sostenibles, resistentes, sanos, limpios y respetuosos con el clima, la integración de los objetivos de política relacionados con la alimentación y la participación de todos los actores relevantes en la cadena de suministro de alimentos.
Teniendo en cuenta las múltiples consecuencias económicas, medioambientales y sociales de la producción y consumo de alimentos, el CESE ha hecho hincapié en la necesidad de adoptar un enfoque holístico cuando se trata de política alimentaria, también en el contexto de los esfuerzos de la UE para poner en práctica los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. El CESE anima a un enfoque interdisciplinario, que reúna a las Direcciones Generales competentes de la Comisión, los ministerios, las instituciones de los Estados miembros, las autoridades y los actores regionales y locales, con el fin de establecer una política integral sobre la transición de los sistemas alimentarios más sostenibles.
Dada la importancia de tener en cuenta los crecientes desafíos a los que se enfrentan las partes interesadas en la cadena de suministro de alimentos, existe de un lado, una creciente demanda de alimentos junto con la presión para reducir el impacto ambiental de los productores y, de otro, un cambio por parte de los consumidores hacia dietas más sanas y nutritivas con una menor huella de carbono. El CESE insiste en que las políticas de la UE deben promover una transición gradual a los modelos agrícolas fósiles sin combustible, un uso más eficiente de los recursos como la tierra, el agua y los nutrientes, y la elección de alimentos más sostenibles que sean más accesibles a los consumidores, con el fin de controlar el impacto del la producción de alimentos y el consumo sobre el cambio climático.
El dictamen pide a los operadores de la cadena de suministro invertir en tecnologías agroambientales y técnicas respetuosas con el clima. Además, el CESE insiste en que los precios de los alimentos deben ser considerados desde la perspectiva de los consumidores y productores, debido a sus efectos sociales y al reciente cambio en el poder de negociación en favor de una industria concentrada de los fabricantes de alimentos y minoristas.
El dictamen del CESE también ha abordado otros factores de largo alcance, que deben tenerse en cuenta para la aplicación de una exitosa política alimentaria sostenible, la prevención de residuos de alimentos, la promoción de dietas más saludables y sostenibles, la importancia de la investigación y la innovación y la necesidad de luchar contra las enfermedades animales y vegetales para aumentar la robustez del sistema alimentario.
