Los eurodiputados reclamaron a la UE que intensifique sus esfuerzos para regular las redes sociales al tiempo que salvaguarda la libertad de expresión y evita la censura.
A la vista de los acontecimientos recientes en Estados Unidos, incluido el ataque contra el Capitolio y la suspensión permanente de las cuentas en redes sociales, los eurodiputados debatieron el 11 de febrero, el vínculo de los nuevos medios con la libertad de expresión, los derechos fundamentales, el estado de la libertad de los medios en la UE, así como las campañas de desinformación en internet.
La discusión en el pleno tuvo lugar en el contexto de varios procesos legislativos y políticos, como las propuestas para sendas leyes de servicios digitales y mercados digitales, que incluirán nuevas reglas para las plataformas y soluciones para acabar con el contenido nocivo o ilegal en línea, como la desinformación.
Los eurodiputados sostuvieron que el mundo digital debe ser regulado a través de las leyes establecidas por las autoridades democráticas y no según las directrices de los gigantes de internet. Las leyes deben garantizar la libertad de expresión y los derechos fundamentales y evitar la censura.
La eurodiputada socialista estonia Marina Kaljurand defendió que las medidas actuales contra la desinformación y la incitación al odio son "insuficientes para para contrarrestar el asalto a nuestra democracia" y señaló que los incidentes en el Capitolio demostraron que "las consecuencias de permitir que la desinformación y el odio se propaguen por internet sin control son evidente para todos".Kaljurand acogió con satisfacción la legislación propuesta y añadió que la UE abrió el camino y dio el ejemplo con el reglamento de protección de datos. "Ahora tenemos que ir más lejos. (…) Esta es nuestra oportunidad de liderar el camino, y espero que podamos hacerlo junto con nuestros aliados en Estados Unidos y más allá", defendió.
La eurodiputada italiana Annalisa Tardino, del grupo Identidad y Democracia, subrayó la necesidad de establecer reglas claras para los gigantes de internet, cuyas "políticas impactan en el mundo real" y quienes parecen que son los que deciden cuáles son los mensajes que se pueden aceptar y cuáles no. Las decisiones sobre el contenido permitidos en las redes sociales, señaló la eurodiputada, no deben tomarlas las plataformas digitales, sino que deben pasarse en una ley que establezca reglas y procedimientos claros. "Depende de los legisladores (…). La UE tiene que proteger el debate libre y democráticos en las redes sociales", afirmó.
El pleno también trató el uso de los datos personales por parte de los gigantes tecnológicos. La eurodiputada alemana Alexandra Geese, de Los Verdes/EFA, defendió que no deben ser ellos quienes censuren arbitrariamente el contenido que consideren nocivo. "Eso no es una opción para la democracia. La solución es fácil: prohibamos el modelo de negocio basado en la vigilancia restringiendo la publicidad dirigida y la elaboración de perfiles", sostuvo.
La vicepresidenta de la Comisión Věra Jourová también participó en el debate y apuntó a que la ley sobre servicios digitales tiene como objetivo incrementar la responsabilidad de las plataformas digitales y aclarar las reglas sobre la eliminación de contenido ilegal, incluido el discurso de odio y la incitación a la violencia: "Necesitamos poner orden en la expresión digital de la democracia y poner fin al salvaje oeste digital", señaló. Jourová se comprometió a proponer reglas sobre el discurso político en línea.
La eurodiputada polaca Magdalena Adamowicz, del Partido Popular Europeo, se centró en la situación en Polonia, donde muchos medios de comunicación están actualmente protestando por los planes del gobierno para introducir una tasa sobre los anuncios. "Pido a toda la comunidad europea que actúe y muestra solidaridad con a libertad mediática polaca porque si ocurre en Polonia, os puede ocurrir a vosotros también", advirtió.
Otro de los oradores, el eurodiputado rumano Dragoş Tudorache, del grupo Renew Europe, incidió en que no hay un mundo en línea y otro fuera de ella, sino que "hay solo un mundo, en el que tenemos que proteger los derechos de nuestros ciudadanos y nuestras democracias tanto dentro como fuera de la red". Tudorache urgió una cooperación más estrecha entre los estados democráticos y las compañias de redes sociales, y subrayó que hay que colaborar con otros países para definir reglas que se basen en valores comunes y luchar contra las prácticas a las que recurren China y Rusia. "Necesitamos usar todo nuestro arsenal diplomático para proteger los derechos nuestros ciudadanos y nuestro estilo de vida en línea", dijo.
Algunos eurodiputados que intervinieron en el debate mostraron su preocupación por la falta de respeto hacia la libertad de expresión. El eurodiputado belga Geert Bourgeois, del grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos, advirtió que el sistema de "notificación y acción" llevará a la censura. "Las plataformas tendrán que ejecutar todas las notificaciones a través de su algoritmo y la consecuencia será la censura políticamente correcta", dijo. “La libertad de expresión debe ser nuestro punto de partida” y las restricciones a la libertad de expresión deben ser una excepción. “Hay países donde la censura está prohibida en la constitución y este debería ser también el caso de la UE”, concluyó.
La eurodiputada francesa Anne-Sophie Pelletier, de La izquierda, destacó la necesidad de proteger la libertad de expresión y opinión. "En internet, la libertad de un grupo de personas no debería detenerse donde deciden los jefes de las grandes plataformas", dijo. "No podemos permitir que se censure un contenido sin una decisión de un juez… la censura nunca es la respuesta".
La secretaria de Estado de Asuntos Europeos de Portugal, Ana Paula Zacarias, en representación de la presidencia del Consejo concluyó: "Esperamos que las plataformas en línea desempeñen su papel en esta lucha común, pero depende de las instituciones democráticas, nuestras leyes, nuestros tribunales establecer las reglas del juego, definir qué es ilegal y qué no lo es, qué se debe eliminar y lo que no debería ser".