El Proceso de Kimberley, que es una iniciativa internacional para frenar el comercio ilegal de diamantes de países en conflicto, ha señalado a la Unión Europea para asumir su presidencia en 2018. Siguiendo las normas del Proceso de Kimberley, la UE asumirá previamente la vicepresidencia en 2017 durante la presidencia de Australia.
La Unión Europea tendrá una oportunidad única para fortalecer la eficacia del Proceso de Kimberleydurante su presidencia, en particular en el contexto del futuro proceso de reforma. En el periodo de su presidencia, la UE reforzará y promocionará un diálogo abierto sobre los tres pilares en los que se sustenta esta iniciativa: gobiernos, industria y sociedad civil.
El Sistema de Certificación del Proceso de Kimberley nació en 2002 como una coalición única de gobiernos, sociedad civil y la industria de los diamantes en respuesta del rol de los diamantes como financiadores de las más sangrientas guerras civiles en África.
Este sistema pone en marcha una serie de requisitos para controlar las importaciones y exportaciones de diamantes en bruto por parte de los países y desarrolla unos mecanismos de control interno muy estrictos sobre producción y comercio de este mineral. Los Estados participantes sólo pueden comerciar legalmente con otros países que se encuentren dentro de este proceso y que reúnan las condiciones mínimas establecidas por el Sistema de Certificación. Asimismo, el comercio de diamantes en bruto debe ir acompañado por un certificado que garantice que no se han obtenido de zonas en conflicto.
La UE ha estado liderando el Proceso de Kimberley desde su aparición. Asimismo, ha estado presidiendo el Grupo de Trabajo sobre Supervisión para analizar los mecanismos de aplicación del sistema de certificación por otros países firmantes y analizando los casos de incumplimiento del mismo. Además, la UE ya presidió esta coalición en 2007.