Julia Maanawadu (25) y Tuomas Lahtinen (18) son dos finlandeses que encontraron una oportunidad laboral en Irlanda antes de la pandemia, gracias a una colaboración entre EURES Finlandia y EURES Irlanda. Durante su estancia en la isla esmeralda, adquirieron valiosas competencias profesionales, vivieron experiencias inolvidables e hicieron nuevas amistades.
«Trabajar en el extranjero siempre había sido mi sueño»
Cuando la estudiante de turismo Julia asistió a una Jornada de la carrera profesional EURES, organizada en el campus de la Universidad de Ciencias Aplicadas de Satakunta, región situada al suroeste de Finlandia, ignoraba que sería el inicio de un viaje que le cambiaría la vida.
«Decidí que iría y echaría un vistazo, porque trabajar en el extranjero siempre había sido mi sueño», afirma la joven finlandesa.
Dos semanas después de hablar con los consejeros EURES Irlanda en el evento, Julia recibió un correo electrónico de ellos donde le informaban sobre la existencia de prácticas para estudiantes finlandeses en una cadena hotelera de Irlanda. «Estaba en un momento de mi vida en el que necesitaba un cambio de ambiente y estilo de vida. No había nada que me lo impidiese, así que pensé que era el momento perfecto para hacer algo así.»
El estudiante de hostelería Tuomas tenía también muchas ganas de adquirir experiencia profesional en otro país. «Cuando me hablaron de la oportunidad de trabajar en el extranjero, me inscribí inmediatamente», afirma el joven chef en formación.
Tuomas supo de la existencia de EURES por su profesora Jukka Mäkinen, que lo animó a presentarse y le dio algunos consejos en relación con las preguntas que debía realizar.
«Fue muy emocionante viajar al extranjero solo por vez primera», recuerda el joven estudiante de hostelería.
Julia y Tuomas se sienten muy satisfechos del apoyo que recibieron de los consejeros EURES en Finlandia, que les ayudaron a tramitar la documentación de trabajo, les dieron consejos prácticos y los orientaron para solicitar ayuda económica de la UE.
«Una oportunidad excelente de aprender de un modo nuevo y emocionante»
En su función de recepcionista del Sheraton Athlone Hotel, Julia se ocupaba del registro y la salida de todos los huéspedes, así como de atender las llamadas telefónicas, gestionar reservas, responder a las solicitudes de los clientes, facturar, realizar ventas adicionales, reservar taxis y facilitar información turística. «Mejoré mucho mi inglés. También tengo la sensación de que gané seguridad y tranquilidad en la relación con los clientes.»
Durante sus prácticas, Tuomas trabajó en las cocinas del Hodson Bay Hotel, situado en la región central de Irlanda, donde conoció los entresijos de la cocina irlandesa, aprendió nuevas técnicas culinarias y mejoró sus competencias comunicativas. «Recomiendo encarecidamente participar en este programa porque es una oportunidad excelente de aprender de un modo nuevo y emocionante», sostiene el joven chef.
«Una gran experiencia para recordar»
Los dos jóvenes finlandeses afirman con rotundidad que su experiencia EURES no solo ha sido excelente para sus carreras profesionales, sino que les ha ayudado a crecer como personas, y su recuerdo les acompañará toda la vida. «Todo el mundo debería probar a trabajar en el extranjero», recomienda Julia. «Aprendes mucho y adquieres una nueva perspectiva de las cosas». Tuomas recuerda con cariño: «¡Mi período de prácticas en Irlanda fue una experiencia inolvidable e increíble!».
Otra de las cosas de incalculable valor que los dos estudiantes hicieron durante su estancia en el extranjero fueron amistades. Tuomas entabló amistad con su compañero de habitación y colega Jaïro, con quien sigue todavía en contacto. Por su parte, Julia conoció a su novio Stephen, con quien está pensando en la posibilidad de abrir un hostal en el futuro.